Tauro, Virgo y Capricornio: el trígono de tierra que abre el camino a las concreciones
Los signos de tierra nos aportan estabilidad, solidez, concreciones. Nos permiten conectar de una manera especial con el cuerpo, con la salud, con los cinco sentidos, las posesiones materiales, la naturaleza.
Tauro, Virgo y Capricornio, los signos de tierra
En estos días Mercurio en Virgo hizo trígono con Urano en el signo de Tauro, proponiéndonos afinar las ideas, darle forma y aprovechar la energía para potenciar los enormes cambios que a nivel individual o colectivo podemos estar sintiendo a lo largo de este 2022, especialmente en temas económicos, cambios ambientales, en la alimentación o la valoración personal. Y a partir del 24 de agosto, Urano comenzará a retrogradar, volviendo una y otra vez a confrontarnos con la sensación de cambio, enfrentándonos a lo desconocido pero pidiéndonos creatividad para salir airosos.
También estamos asistiendo al tránsito de Marte en el signo de Tauro haciendo trino con Plutón en Capricornio. Este aspecto sacude estructuras viejas que deben morir en nosotros pero, al mismo tiempo, nos facilita ese camino hacia el cambio, aunque sintamos temor a enfrentarlo.
Y Mercurio también hará trígono con Plutón el 22 de agosto cerrando la semana de aspectos favorables en los signos de tierra. La apuesta es planificar con los pies en la tierra, apostando a un orden para obtener resultados concretos.
Astrología
De todas maneras, es sólo el adelanto de lo que se vendrá la semana próxima con la entrada del sol en Virgo y la luna nueva en el mismo signo, ayudándonos a organizarnos, a crear rutinas que nos permitan seguir un plan de trabajo, a revisar nuestra salud y a afinar nuestra capacidad de observación de todo lo que ocurre a nuestro alrededor.
El consejo: si bien la propuesta es para todos los signos, a aquellos nacidos bajo signos de aire (Acuario, Géminis o Libra) les puede costar un poco más la conexión con la tierra. Es por eso que estos días son buenos para intentar un contacto más cercano con la naturaleza, observar nuestra alimentación y el cuidado de nuestro cuerpo o disfrutar de una buena comida. También podés tomar lápiz y papel y escribir aquellas ideas que estén dando vueltas en la cabeza. Aunque no podamos darle forma, el intentar plasmar en el papel las palabras marcan el comienzo de la acción.
